David Fernández Leonyuk

¡Hola! Soy David y mi principal objetivo es que mis alumnos no solo aprendan, sino que disfruten al máximo el proceso. En clase trabajamos también el desarrollo de la constancia, con el fin de ayudar al alumno a cultivar ese hábito, enseñándole cómo hacerlo y acompañándole en el camino.


Comencé mis estudios de piano cuando tenía ocho años con la profesora Lyudmila Doronyna. Entre 2012 y 2018, continué mi formación en el Conservatorio Profesional de Música Victoria de los Ángeles de Madrid con el maestro José Enrique Moreno Gistaín, obteniendo varias Matrículas de Honor consecutivas en piano y música de cámara, y durante un año recibí además clases del gran pianista Andreas König.


A los doce años ofrecí mi primer recital como solista en la Fundación AMYC y, al año siguiente, tuve la oportunidad de actuar en el Teatro Ateneo dentro del marco del Must Talent Festival. Además, durante aquella etapa, logré el Primer Premio en la categoría Grupo A del XVIII Premio Infantil de Piano Santa Cecilia, participé en el Festival de Música de Segovia y realicé un curso de seis meses en la Escuela de Música Viva Tchaikovsky de Gijón con la profesora Natalia Mazoun.


En 2018 participé en el XX Curso de Interpretación Musical Valle del Ambroz y obtuve el Segundo Premio en el Concurso Nacional de Piano Mestre Soutullo, y en 2019 recibí el Segundo Premio de mi categoría en el Concurso Internacional de Piano “Gran Klavier”.


Finalicé las Enseñanzas Profesionales a los 16 años en el Conservatorio Profesional Nuestra Señora de Loreto con la profesora Nina Kereselidze y, en 2025, completé los Estudios Superiores en la Escuela Superior de Música Forum Musikae con el reconocido maestro Iván Cítera.


He recibido clases magistrales de maestros de la talla de Imre Rohmann, Juan Fernando Moreno Gistaín, Miguel Ituarte, Filipe Pinto-Ribeiro, Eldar Nebolsin, Sofía Nebolsina, Javier Negrín, Pilar Valero y Alexander Kandelaki.


Como docente, cuento también con varios años de experiencia dando clases a niños y adultos, y creo firmemente que la música puede transformar la manera en la que las personas tratamos con la creatividad, la sensibilidad y el esfuerzo. Por eso, adapto mi manera de enseñar a la personalidad de cada alumno, buscando que se sienta motivado, valorado y orgulloso de sus progresos. Lo que más me llena de dar clase es ver cómo poco a poco el piano se convierte en una parte de su vida y en una fuente de alegría y satisfacción.

    David Fernández Leonyuk